IS FOOTBALL COMING HOME?

Is football coming home?

Año 2014. Brasil. Inglaterra hacía las maletas tras no poder superar a Italia, Uruguay y Costa Rica. Los “Three lions” caían de manera humillante y volvían resignados a las islas. Hoy 4 años después están a tan solo un partido de colarse en su segunda final de una Copa del Mundo en la historia. ¿Casualidad? Para nada.

Cuando la federación inglesa tomó la decisión de nombrar a Gareth Southgate seleccionador la sorpresa fue notable. Tras los escándalos de Sam Allardyce y su destitución nadie sabía hacia dónde podría encaminarse el futuro de la selección inglesa. Necesitaban una remodelación urgente y Southgate fue el encargado de llevarla a cabo. Por si fuera poco el hasta ahora capitán y referente del combinado, Wayne Rooney, anunció su retirada. Pero con todo en contra, supieron salir a flote.

Tras superar la fase clasificatoria sin apenas sufrir, Inglaterra quedó emparejada con Bélgica, Túnez y Panamá. A priori parecía un grupo sencillo de superar, aunque ya sabemos cómo son los ingleses…Los meses previos a la gran cita fueron de mucho trabajo para el cuerpo técnico. Southgate realizó un intenso trabajo para perfeccionar el trabajo de su equipo, tomando para ello referencias de otros deportes. Aplicó los bloqueos típicos del baloncesto para sus jugadas a balón parado, además de aplicar una curiosa estrategia, el “trenecito”. Para ello coloca a todos los rematadores en una fila perpendicular a la portería, y cada uno de ellos emprende una trayectoria diferente. Normalmente los rematadores suelen ser Kane o Maguire, y su eficacia está siendo considerable.

Llegó la hora de afrontar la cita mundialista y los pross arrancaron con una agónica victoria por 2-1 frente a Túnez, con un doblete de Harry Kane. La fase de grupos concluyó tras una contundente victoria frente a Panamá por 6-1 y una derrota frente a Bélgica por 0-1. Una vez superada la fase de grupos tocaba afrontar los octavos de final frente a Colombia. Y lo que sucedió entonces quedará para siempre en la memoria de los aficionados ingleses. Tras un agónico empate a uno (Yerri Mina empató en el minuto 93) llegó la siempre temida tanda de penaltis. Y ahí es donde todo sucedió. Gracias a los tantos de Harry Kane, Marcus Rashford, Kieran Trippier y Eric Dier, y a la parada de Jordan Pickford, lograban superar la primera tanda de penaltis de su historia. Algo estaba cambiando.

Tras esa victoria algo cambió. Los aficionados comenzaron a creer que era posible hacer algo histórico. El ya mítico “It’s coming home” empezó a sonar por todas partes y un sentimiento de euforia se apoderó de todos los aficionados ingleses. Una vez superados los octavos de final tocaba afrontar los cuartos de final. Solo Suecia se interponía entre ellos y unas semifinales más de 20 años después. El partido fue muy intenso y acabó decidiéndose gracias a dos cabezazos de Maguire y Dele Alli.

Todo esto ha sido posible gracias a un cambio radical de estilo y a la aparición de un entrenador que prácticamente nadie conocía en las islas, Mauricio Pochettino. De la mano del de Murphy jugadores como Kane, Dele, Walker, Dier o Trippier se han afianzado en la selección con un estilo propio. También ha tenido influencia en el estilo de juego de la selección en aspectos como la salida de balón o la participación atacante de los laterales.

Su rival en semifinales será una Croacia que ha ido de más a menos en este Mundial. Llega mermada físicamente tras superar dos tandas de penaltis frente a Dinamarca y Rusia, dos partidos en los que no lograron hacerse con el control total del partido. Su principal referente es Luka Modric, el cual está realizando un torneo prácticamente perfecto. En caso de superar a este difícil rival deberán hacer frente a Francia o a Bélgica, por lo que el camino hacia su segunda copa del mundo se antoja muy complicado.

A falta de una semana para que el Mundial llegue a su fin, todo es posible. Inglaterra está a dos partidos de repetir el hito de 1966. A dos partidos de hacer historia. En definitiva, a dos partidos de que el fútbol vuelva a casa. Ahora todo el mundo se hace esa misma pregunta: ¿Is football coming home?